Dormir bien es fundamental no solo para el descanso del organismo, sino porque mientras dormimos, todo nuestro cuerpo se “resetea”, como una pequeña “puesta a punto”. Por eso, cuando hemos descansado bien nos despertamos con energía y ganas de comernos el mundo (¡y una buena caja de frutos rojos!)
Sin embargo, si preguntamos a nuestro alrededor, es muy frecuente encontrar a personas de todas las edades que no descansan bien por la noche, sufren algún problema para conciliar el sueño o por su trabajo o estilo de vida, duermen menos horas de las que deberían y eso altera su ritmo circadiano. Desde Fresón de Palos sabemos que dormir bien y despertarnos descansados es clave para poder funcionar en nuestro día a día, por eso os vamos a compartir algunas recomendaciones para mejorar nuestros hábitos de sueño.
- La primera de todo es intentar mantener unos horarios que nos permitan dormir unas 7-8h. Para ello, si tenemos que madrugar, será aconsejable irse a la cama un poco antes de lo normal. Nuestro cuerpo está pensado para despertarse con el sol y acostarse cuando oscurece. Intenta que tus horarios no se alejen mucho de esta referencia.
- Realiza actividades que favorezcan la relajación: una ducha caliente, un vaso de leche, alguna pieza de fruta (¡las fresas y fresones son estupendos por la noche al tener muy pocos azúcares!), etc. También puedes usar aceites esenciales como el de lavanda que facilitan la calma.
- Evita hacer deporte a última hora de la tarde o por la noche. Si no tienes otro horario para practicar, intenta que sea una actividad de intensidad leve.
- Las series y películas, mejor para los fines de semana. Y con el alcohol igual. Nada de beber antes de irte a dormir.
- Evita las cenas y comidas copiosas por la noche. Lo recomendable es irte a la cama una hora u hora y media después de haber cenado algo ligero. Aquí puedes ver algunas recetas muy apetecibles.
- Tu habitación debería estar a una temperatura confortable, ni muy fría ni muy calurosa. Hay personas que les gusta dormir completamente a oscuras y otras que prefieren algo de luz y la puerta abierta. ¿Cuál es tu caso?
- También es aconsejable despejar nuestra habitación de elementos que no favorezcan ese sueño. Aquí entran televisiones, aparatos eléctricos, etc. Las pantallas emiten una luz azul que despierta a nuestro cerebro. Por eso, si lo que buscamos es un sueño profundo y reparador, no es recomendable ni estar con el móvil ni la televisión antes de quedarnos dormidos y tampoco si nos desvelamos en mitad de la noche. ¿Qué sí es aconsejable? Tener a mano un libro y leer un poco antes de quedarnos dormidos.
- Por último, hay muchos profesionales especializados en sueño. Si ves que tu insomnio es crónico, intenta averiguar la causa (ansiedad, estrés, hormonas, fatiga…) y consulta con un especialista para saber cuál es el tratamiento más aconsejable según tu caso.
¡Felices sueños!