
PREPARA LOS INGREDIENTES
NOSOTROS PONEMOS LAS RECETAS
6 nectarinas
150 gramos de queso feta
Especias al gusto
1 pizca de sal
3 cucharadas de miel
Aceite de oliva virgen extra
El queso feta es un derivado lácteo muy tradicional de Grecia, conocido por su peculiar textura y su exquisito sabor. Se trata de un queso de leche de oveja bastante intenso, que en ocasiones se puede mezclar con leche de cabra o de vaca para rebajar su sabor.
Lo reconocerás por su textura granulada, muy similar a un queso fresco, pero mucho más compacto. Al corte se pueden apreciar en su interior múltiples agujeros y grietas, así como la liberación de parte del suero que queda retenido en la masa.
El queso feta se madura en salmuera, y no tiene ningún otro conservante más que la sal que impide su fermentación. A diferencia de otros quesos que tienen similar proceso de maduración, el queso fresco griego tiene un sabor algo más ácido que contrasta con el salado de la salmuera.
Una de las mejores propiedades que tiene el queso feta es que resulta muy fácil de digerir. Contiene una gran cantidad de probióticos que mejoran el tránsito intestinal y potencian la función del sistema inmunitario.
Aunque su contenido en grasa es elevado, la concentración de proteínas de este queso es mucho mayor que en otros quesos curados. Consumiendo una pequeña cantidad de queso feta estamos aportando apenas 80 kcal en una comida, que sin embargo gana mucho en sabor.
Inclúyelo en tus ensaladas y para acompañamiento de otros platos, como por ejemplo esta rica receta de nectarinas a la parrilla con queso feta y tus especias favoritas. ¡Para chuparse los dedos!